Tratamiento Para la Hiperacusia

Lo siguiente es solo para fines informativos generales. Consulte a su proveedor de atención auditiva si tiene preguntas específicas sobre su salud auditiva y su atención médica.

Actualmente, no existe un tratamiento médico estándar.

La hiperacusia a menudo mejora por sí sola, con el tiempo y el silencio, durante muchos meses o años, pero la mejoría es engañosa y las personas pueden sufrir fácilmente una recaída, con su progreso borrado por una sola afrenta (injuria) adicional de ruido. Evitar las recaídas es importante para mejorar.

Algunos pacientes con hiperacusia leve mejoran con la terapia de sonido, que utiliza un sonido de banda ancha muy suave para elevar la tolerancia.

Por otro lado, muchas personas con hiperacusia dolorosa han descubierto que este enfoque a menudo empeora su hiperacusia porque necesitan controlar su exposición al sonido y proteger sus oídos contra sonidos riesgosos o sorpresivos. (Vea información en español sobre tratamientos, de la audióloga Shelley Witt, M.A., CCC-A, de la Universidad de Iowa).

Pocos profesionales médicos están profundamente familiarizados con la hiperacusia, y pueden dar consejos o prescribir pruebas que, en última instancia, hacen más daño que bien. A menudo a los pacientes se les dice por ejemplo, que los sonidos ordinarios no pueden hacerles daño, pero ellos aprenden a través de experiencias desafortunadas que lo contrario es cierto en su caso.

También existe la posibilidad, tal como ha sido reportado por varias personas con hiperacusia dolorosa, de que pruebas como el test de "nivel de incomodidad al ruido" (LDL por sus siglas en inglés), que a veces se administra para medir la tolerancia, pueden empeorar los síntomas de la hiperacusia. Existe una preocupación similar sobre otras pruebas ruidosas, como las resonancias magnéticas. Es importante discutir la necesidad de tales pruebas con sus proveedores de atención médica y la mejor manera de mitigar el daño si experimenta algún síntoma de hiperacusia.

La protección auditiva-el uso adecuado de tapones para los oídos y orejeras, siempre que las personas corran el riesgo de sufrir un ruido sorpresivo o se encuentren en un entorno de ruido por encima de su tolerancia-, es esencial no solo para controlar la incomodidad y el dolor de la hiperacusia, sino también para evitar que empeore. El silencio promueve la curación.